Luego de más de un año y medio de pandemia, aprovechando todas las herramientas que entregan los medios digitales, El Gran Priorato Templario de Chile vuelve a las actividades presenciales. Esto se hace posible gracias a las actuales cifras de contagios en el país, que marcan los índices de positividad más bajos desde el inicio de la crisis sanitaria. A esto se suman las medidas de prevención adoptadas por la Encomienda de Puente Alto, entre las que se cuentan protocolos de desinfección, aforo y realización de una encuesta preventiva, así como la exigencia de uso de mascarillas y de vacunación al día.
En esta ocasión, el GPTC tuvo la oportunidad de iniciar a siete nuevos miembros que ya habían participado de las reuniones en línea, bajo el esquema creado especialmente para mantener su vínculo con la Orden, hasta que esta pudiese integrarlos formalmente en sus ceremonias.
La oficialidad de la Encomienda manifiesta gran júbilo por esta recepción, y espera poder continuar con las reuniones presenciales, tomando siempre los debidos resguardos.